sábado, 24 de noviembre de 2012

LA LUNA




















 "La luna se puede tomar a cucharadas
 o como una cápsula cada dos horas." 
                              JAIME SABINES
    
 
La Luna sigue ahí colgada.
Me da igual que insistas
en que su luz no es propia
y en que ese rostro de cráteres
no es una mueca simpática
de ecce homo restaurado.
Sigo viéndola enorme
cuando sale por las montañas
y encoger al alejarse
como globo de helio
hacia el cénit cada noche.
¿Efecto óptico? Es posible.
¿Que no la pisó Armstrong
en aquel pequeño gran paso?
Puedes cuestionarlo.
Si la cara oculta 
no esconde misterios,
ni caso. A pesar de todo,
me declaro lunática social.
Seguiré bebiendo luna,
emborrachándome de mareas,
renaciendo y decreciendo
hasta ser nueva.
¿Que se aleja por centímetros 
cada año de la Tierra?
Yo también. Por eso me pinto
una mueca de luna arcana 
en mi poema. A tu salud.



 Imagen:  Louise Butler - Journey to Nimbus






miércoles, 21 de noviembre de 2012

TIEMPO



















Me pregunto si la paz llega
cuando la calma se cubre
de mantas y mantas de tiempo.
Si la quietud de hojas de otoño
sacia las células
que guardan memoria de fuego.
El tiempo cura -dicen-,
también mata -lo sabemos-. 
Y en tanto el tic-tac 
golpea incesante mis sienes,
muero en la asfixia de siglos
que contiene este momento.


Imagen: Egon Schiele. Four Trees, 1917.

domingo, 18 de noviembre de 2012

MÚSICA


















La música estalla en colores
y brilla con la ingravidez
de mil partículas
doradas en la tarde.
Polvo invisible
de luz de sol
con que me elevo
por encima de los tejados
y así descompuesta,
vibro y trenzo risas
ajena a los anteojos
de la lógica y la razón.

Imagen:  Colin McCahon, French Bay

miércoles, 14 de noviembre de 2012

MIRILLA


 
Este poema es una mirilla
-no es real, sólo está pintado-
como el ojo de un camaleón.
Puedes asomar,
adentrarte en su esqueleto
e imbuirte de su impúdico color.
Mimetízate conmigo en el poema,
vístete de tinta de fuego
y en dos minutos...
desaparece.
No es necesario que te desnudes,
sólo despiójate de atavismos.
¿Ves qué fácil?
Ya no existes.  Eres ficción.


Imagen:  Mirada salvaje. El ojo de un camaleón velado.  The Grosby Group | Grosby

sábado, 10 de noviembre de 2012

HAY DÍAS






















Hay días en que todo sobra.
Todo hace ruido.
Personas, radio, pantallas, libros.
El ropaje que te envuelve pesa,
aturde la luz, el calor, el frío.
No hay ventana ni corriente de aire
ni balcón al que asomarse
que te despoje del vacío.
Entonces te desnudas de piel
frotas tus vísceras con estropajo
para borrar el óxido
y dar cuerda a los latidos.
Sigue siendo vano el intento,
te sobran huesos y carne,  
el dolor, la gravedad,  
la materia gris y la sangre.   

Hay días en que todo falta.
El silencio es infinito.
La paz no está en la ausencia,
ni en la oscuridad,
ni en la gente, ni al aire libre,
ni en la caverna donde te refugias 
y duermes.
Puedes ir deprisa o parar
en mitad de cualquier camino.
El grito no se oye,
las palabras están sordas,
la llama no prende,
la herrumbre te cubre
sin solución aparente.

Hay días. Eso es todo.
Días unos sobre otros
amontonados sin orden. 
Pero a veces, sólo a veces,
un rayo del mismo sol
que alumbraba a tus ancestros
es suficiente para hacerte
sentir en armonía
con los seres inertes y los vivos. 
Puede que la felicidad sea eso.   


Imagen: Joan Miró. El oro del azur, 1967

miércoles, 7 de noviembre de 2012

CONVERSACIÓN METEOROLÓGICA DE ASCENSOR







-¡Cuánta crisis! El campo necesitaba recortes pero esto ya es demasiado. ¡Cala los huesos! -Exclamó efusivamente el vecino de la correduría de seguros del cuarto. 

 -Tiene usted razón. ¿Han dicho en las noticias para cuándo sale el sol? -Intervino el vecino de la asesoría del quinto. 

-El político del tiempo ha dicho que lo peor del temporal está por llegar y que no volveremos a ver el astro rey como lo conocíamos. Se prevén nuevas heladas económicas e inundaciones de impuestos. Seguirá cayendo gente. -Repuso resignado el vecino del cuarto.

-En fin, al menos seguimos vivos. -Resolvió el del quinto. 

 -Sí, hay que dar gracias al cielo. Buenos días. -Se despidió el vecino de la oficina de seguros abriendo la puerta del ascensor. 

 -Pase usted buen día también.-Contestó el otro dirigiéndose a su despacho.


Imagen: Juan Antonio Serrano García. 
 http://wwwjuanserrano.blogspot.com.es/2012/03/venta-de-originales-revista-cthulhu.html
 

viernes, 2 de noviembre de 2012

TRISTEZA
















 


Fluye, tristeza, por última vez.
Pero esfúmate pronto y vete.
Ya te he dedicado bastante tiempo.
Prescindo de tus servicios.
He atendido con creces tus requerimientos,
síntomas y efectos.
-Ojeras de luto, insomnios sin luna, lágrimas a cubos
y máscaras ante el espejo.-
-Dolor incierto, liviandad de células, temblores
y frío de huesos.-
Deseo concluir relaciones comerciales contigo.
He sido la perfecta melancólica
y me empalaga ya tu tufillo melifluo.
Recoge tus cosas y vete. Sin despedidas. No son necesarias.
Cuando despierte, no quiero verte cerca.

Mil gracias, estimada tristeza.
Sin rencores, sin lamentos.


Imagen: Luis Feito López. Composition, 1988.